La ONU apoya las primeras elecciones palestinas en quince años
La Organización está preparada para apoyar los avances y que el pueblo palestino pueda ejercer sus derechos democráticos, ya que “las elecciones son una parte fundamental de la construcción de un Estado democrático basado en el estado de derecho, con igualdad de derechos para todos”. Además, ese proceso contará con un mayor número de mujeres.
Los comicios legislativos, presidenciales y el Consejo Nacional Palestino, previstos para el 22 de mayo, el 31 de julio y el 31 de agosto respectivamente, representan un paso crucial hacia la unidad, declaró el martes al órgano de seguridad de las Naciones Unidas el nuevo enviado de la ONU para el proceso de paz en Oriente Medio, Tor Wennesland.
En su primera sesión informativa ante el Consejo de Seguridad, Wennesland explicó que la emisión del decreto presidencial firmado por el mandatario palestino Mahmoud Abbas el pasado 15 de enero supondrá la primera votación en los Territorios Ocupados en 15 años.
De este modo, el diplomático noruego se unió al Secretario General António Guterres en la celebración de esta convocatoria.
“La celebración de elecciones en la parte ocupada de Cisjordania, incluido Jerusalén Este, y en Gaza será un paso crucial hacia la unidad palestina, que dará una legitimidad renovada a las instituciones nacionales, incluido un Parlamento y un Gobierno elegidos democráticamente en Palestina”, destacó.
Wennesland añadió que la ONU está preparada para apoyar los avances para que el pueblo palestino pueda ejercer sus derechos democráticos ya que “las elecciones son una parte fundamental de la construcción de un Estado palestino democrático basado en el estado de derecho, con igualdad de derechos para todos.”
Mayor representación electoral femenina
El presidente Abbas fue elegido en 2005 y su partido Al Fatah controla la Autoridad Nacional Palestina, con sede en los territorios ocupados de Cisjordania. El grupo militante Hamás, que controla la Franja de Gaza, ganó las elecciones parlamentarias celebradas un año después.
Wennesland señaló que las próximas conversaciones en El Cairo servirán para resolver las cuestiones pendientes relacionadas con la celebración de las elecciones y que “serán importantes para el avance del proceso previsto de preparación”.
Añadió que también se ha modificado la ley electoral para aumentar el número mínimo de mujeres representantes pasando del 20 al 26%.
“Aplaudo este paso y me uno al llamamiento del Secretario General a las autoridades palestinas para que tomen nuevas medidas para facilitar, reforzar y apoyar la participación política de las mujeres, incluso como votantes y candidatas, durante todo el ciclo electoral”.
La solución de los dos Estados sigue siendo posible
En un contexto más amplio subrayó el apoyo de la ONU a una solución de dos Estados para palestinos e israelíes, y la esperanza de una paz negociada y duradera en la región.
“A pesar de los importantes desafíos conseguir el objetivo sigue siendo posible. Y en estos momentos hay oportunidades que no deben perderse”, dijo al Consejo.
“Espero que la perspectiva de los recientes acuerdos alcanzados entre Israel y los países árabes conduzca a una situación en la que pueda hacerse realidad un Oriente Medio más pacífico. Sin embargo, se necesita el compromiso significativo de los líderes de todas las partes y volver a la senda de las negociaciones”.
Apoyo de la ONU a la pandemia
Con relación a la respuesta a la COVID-19 destacó el continuo apoyo de la ONU durante la pandemia al pueblo palestino, que se está cobrando un precio abrumador en los Territorios Palestinos Ocupados e Israel.
Las autoridades de ambas partes han reforzado las restricciones de movimiento para hacer frente a la actual propagación del virus afectando a la vida cotidiana.
La ONU y sus socios han proporcionado al gobierno palestino suministros básicos, como equipos de protección personal, aparatos de oxigenoterapia y equipos de pruebas.
A estos esfuerzos, hay que añadirle el apoyo en la preparación para la recepción y eventual administración de vacunas por parte de la Organización Mundial de la Salud y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
Las dosis se adquirirán a través del Mecanismo COVAX, el fondo internacional destinado a garantizar la igualdad de acceso a las vacunas por parte de todos los países. Se espera que las primeras partidas lleguen durante el primer semestre del año.
Mientras el Gobierno palestino trabaja para adquirir un suministro de vacunas y cuenta con el apoyo de COVAX, Israel ha lanzado una campaña de vacunación a gran escala para sus ciudadanos y residentes.
“En este contexto, la ONU sigue alentando a Israel para que atienda las necesidades prioritarias de los palestinos en los territorios palestinos ocupados y apoye la disponibilidad de la vacuna COVID-19 de forma más general. Esto será fundamental para los esfuerzos generales de ambos gobiernos para controlar la pandemia y también está en consonancia con las obligaciones de Israel en virtud del derecho internacional”, explicó.
El inquietante avance de construcciones israelíes en los territorios ocupados
Al mismo tiempo, describió como “preocupante” el hecho de que las autoridades israelíes continúen con sus planes para avanzar en la construcción de asentamientos en los Territorios Ocupados y que hayan avanzado los planes de construcción de unas 800 unidades de vivienda en los asentamientos del Área C y publicado licitaciones para la construcción de unas 1900 unidades en la misma zona y otras 210 unidades en Jerusalén Este.
“De las unidades adelantadas y licitadas, la mayoría se encuentran en asentamientos de la periferia, en el interior de Cisjordania ocupada. Más de 200 unidades están situadas en asentamientos ilegales que las autoridades israelíes están regularizando retroactivamente con arreglo a la legislación israelí”, enumeró.
Wennesland reiteró que, de acuerdo con el derecho internacional, los asentamientos son ilegales y representan un gran obstáculo para la paz y minan la posibilidad de lograr una solución de dos Estados. El diplomático instó al Gobierno de Israel a cesar toda actividad de asentamiento en el territorio ocupado, incluido Jerusalén Este.