Avances tecnológicos que asombraran en el 2022
Antonio Ponciano Díaz
Debo aclarar que, invariablemente, todo avance tecnológico se sustenta en principios o descubrimientos científicos. He de reconocer que a pesar de haber estudiado en la Facultad de Ciencias de la UNAM la carrera de Actuaría, no soy un científico e ignoro mucho de la tecnología, sin embargo, no me limita para entender sus posibles consecuencias. Los avances tecnológicos a los que me refiero cambiaran al mundo y nuestra manera de relacionarnos o interpretarlo, para bien o para mal.
Mapeo del cerebro o proyecto Brain. La neurotecnología ya es capaz de ver y hacer en nuestras mentes mejoras cognitivas sustanciales y cambiar nuestra personalidad. Ha dicho su director del proyecto Rafael Fuste “Tenemos una responsabi
lidad histórica. Estamos en un momento en que podemos decidir qué tipo de humanidad queremos”. Es urgente que los gobiernos del mundo protejan derechos de nuevo cuño: neuroderechos.
El Metaverso. El propietario de Facebook, una de las redes sociales con el mayor número de usuarios en el mundo, ha mencionado que el Metaverso es un mundo virtual, uno al que nos conectaremos utilizando una serie de dispositivos que nos harán pensar que realmente estamos en él, esta forma de comunicarnos permitirá, entre muchas posibilidades, realizar reuniones de trabajo ejecutivas en el mundo sin necesidad de viajar.
El telescopio James Webb. Enviara las primeras fotografías del cosmos para desentrañar la formación de las primeras galaxias y captar información generada hace más de 13, 800 millones de años.
En general nos estaremos enterando de una avalancha de avances tecnológicos que nos asombraran como: Drones que entregan pedidos a domicilio; computadoras cuánticas; dispositivos de nutrición personalizada; construcción de casa con tecnología 3D; biogenética y bioingeniería revolucionaran nuestra forma de alimentarnos y reproducirnos, etcétera.
Qué propiciaran estos avances tecnológicos, más allá de sus beneficios, aumentaran la desigualdad y la vulnerabilidad del ser humano. Mientras tanto nuestros científicos se ven empobrecidos y nuestros centros de investigación y universidades, sumidas en la austeridad.
